INFORME SOBRE LA ECONOMÍA NACIONAL 2013
INFORME
SOBRE LA ECONOMÍA NACIONAL 2013
“El
aspecto central radica en que la economía boliviana es tomadora de precios,
tiene una
elevada apertura externa, sus exportaciones están concentradas en
exportaciones
de recursos naturales no renovables (gas y minerales). En el sector
de
hidrocarburos el contrato de venta al Brasil vence el 2019 y no se han
realizado
inversiones
importantes en prospección y exploración de nuevos yacimientos de
gas. En la
minería tampoco se han realizado inversiones que permitan encontrar
nuevos
yacimientos de minerales.
Las
variables macro económicas registradas durante el 2013 fueron: 6,5 por ciento
de
crecimiento del PIB, 6.48 por ciento de tasa de inflación, superávit fiscal de
0,1 por
ciento respecto al PIB en el Sector Público No Financiero. El crecimiento
económico
global fue mayor a la meta establecida debido al dinamismo del sector
de
hidrocarburos. Sin embargo, no se registraron cambios en el nivel de reservas
de gas
natural que al 2011 alcanzaron 11.53 TCF. La puesta en marcha de la
planta de
separación de Río Grande y el incremento en el procesamiento de las
plantas
de Carrasco y Vuelta Grande, elevaron la producción de GLP.
La minería
no logró igualar ni superar el valor registrado la gestión precedente
por la
caída en los precios y en el volumen de producción. La tendencia a la
baja en
los precios de los minerales iniciada en la segunda mitad del 2011 se ha
prolongado
con alguna intensidad en el 2013. Son dos años y medio de caídas
sostenidas
pero limitadas de precios. No obstante, los precios al terminar el 2013
continúan
altos en comparación a los años anteriores al 2003 y aún permiten un
nivel de
rentabilidad aceptable. La caída de precios corresponde a un aterrizaje
suave ya
que la especulación financiera, activada en los mercados mundiales
de
materias primas en la última década, no ha liquidado aún de forma masiva y
desordenada
los stocks acumulados en el mercado.
El sector
agropecuario incrementó la superficie cultivada el 2013 en alrededor de
100.000
hectáreas. En el departamento de Santa Cruz el cultivo de sorgo creció
alrededor
de 10,3 por ciento de 2012 a 2013, tanto en las campañas de verano
como de
invierno. El cultivo de trigo también se aumentó en más de un tercio. Sin
embargo,
en ambos cultivos el rendimiento por hectárea se redujo por factores
climatológicos.
El 2013
fue marcado por el retorno de presiones inflacionarias ya que la inflación
acumulada
fue del 6,5 por ciento, mientras que las proyecciones del BCB situaban
a la misma
en 4,8 por ciento. A nivel nacional los alimentos han mostrado un
incremento
del 17,4 por ciento, que resulta ser el más alto desde el 2010, mientras
que
el capítulo que comprende salud subió en 8,9 por ciento.
En
conclusión, el desenvolvimiento de la economía boliviana durante el 2013 logró
resultados
positivos, sin embargo la vulnerabilidad de la economía se acrecentó
debido a
que no se pudo superar la dependencia de la explotación de los recursos
naturales
no renovables, cuyos precios fluctuantes se fijan en el mercado mundial
y que
tienden a la baja, comprometiéndose el crecimiento y el bienestar de la
población
si estos precios continúan bajando.”
Si
el rumbo de la economía no varía, con seguridad vendrán vientos favorables pese a la turbulencia internacional. Esperamos que
este año electoral no afecte la misma porque está entrando en funcionamiento la
economía silenciosa que necesita estabilidad y que está en proceso de
consolidación los cimientos creados para la misma. Lo que requerimos en forma
adicional es tratar de no depender de los precios internacionales y afianzar el
mercado interno con calidad y precios razonables.
Fuente:
Informe Fundación Milenio
Comentarios
Publicar un comentario